viernes, 29 de febrero de 2008

El principote

En general, y por motivos más que obvios, ninguna familia real goza de mi especial simpatía. Pero hay una (amén de la española) que ha conseguido contar con tooooooda mi antipatía. Y cada vez se superan más. ¿Adivinas? Sí, claro. La inglesa. La última ha sido unas imágenes que me he tropezado en un informativo, al hilo de que el principote Quique, aquel que apuntaba ya maneras disfrazándose de nazi para una fiesta, está en Afganistán haciendo de Rambo. Lo que verdaderamente me ha hecho sentir bochorno ha sido una imagen de la gorra que lucía el sujeto en cuestión, con el lema 'We do bad things to bad people'. Para los no puestos en la lengua de Shakespeare, 'Hacemos cosas malas a la gente mala'. Qué guay, ¿eh? Cómo mola ser príncipe, estar toda tu vida haciendo el imbécil e irte a Afganistan a lanzar cohetes a los malos.

Por otra parte, no hay mal que por bien no venga... me acaba de lanzar un capote para desmitificar aquello de que sólo los yankis son los soldados locos. La realeza inglesa en el frente no se queda atrás en absoluto. Que dios pille confesados a los 'daños colaterales' afganos. Vomitivo.

J.

lunes, 25 de febrero de 2008

El barbero que se escapó de la Hammer

Recién llegado estoy, con la mente todavía hemoglobínica, de ver lo último de Tim Burton, Sweeney Todd, el barbero diabólico de la calle Fleet. El título en sí es ya de un bizarro imposible, como toda la película. El simple uso de la palabra 'diabólico' (también presente en el título original) ya huele a aquellas producciones en technicolor de la Hammer. No está Christopher Lee, pero tampoco hace falta, porque tenemos a un Johnny Depp igual de desfasado. Y la sangre... pues hay mucha más que en los clásicos Hammer, pero es exactamente la misma, de un rojo pintura tan sumamente artificial que me encanta.

El caso es que lo último de Burton es un musical. A muchos puede sonarles un poco raro, pero a todo aquel que así piense... que repase los trabajos bajo la sombra Burton, que no es el primero. Ya tuvo un par de ellos, en slow-motion, con Pesadilla antes de Navidad y La novia cadáver. Pero esta vez el giro ha sido un pelín excesivo. Hay demasiado musical. Si repasamos las últimas películas de este tipo, con títulos como Chicago, Moulin Rouge, etc., hay un equilibrio muy bueno entre temas cantados y diálogos. Pero hay demasiadas canciones en la cinta de Burton, que hacen que a veces se ponga un poquito coñazo. Salvo esta pega, lo demás me ha resultado excelente.

Si hay algo que destaca son las interpretaciones. Tanto Depp como Bonham Carter (que cada vez se parece más a Gollum) están muy en su papel, y crean un patetismo, profundidad y singularidad a sus personajes bastante trabajado. El resto de secundarios, de lo más Burton. Una suerte de compañía de carnaval de las tinieblas, con la pareja protagonista como maestros de ceremonias.

Los números musicales están bien integrados, y la verdad es que todo el mundo tiene buena voz, leñe. Eso sí, como ya he dicho, a veces un poco cansinos. Sorpresa para mí, Danny Elfman no está detrás de la música, sino que esta vez la cosa ha corrido a cargo de Stephen Sondheim, que supongo estará relacionado con el musical original de Broadway.

La peli, como ya he dicho, es sangrienta. Pero es esa sangre tan encantadora, tan roja, tan artificial, que destaca tantísimo en esa escenografía y tono gris general de todo el film, que no podríamos decir siquiera que la película es 'sangrienta', en el sentido desagradable. Claro que yo también he visto mucha sangre en el cine, y lo mismo ya he perdido el norte... Igual que el propio Sweeney Todd. Me alegro de haberme dejado barba.

J.

jueves, 21 de febrero de 2008

¡Se nos ve el plumero!

Vaya, vaya, vaya... ¡Pues qué sorpresa! Hoy me he encontrado con que los periódicos están voceando que en los anuncios de la campaña electoral del PSOE el partido está pidiendo desesperadamente que la gente vaya a votar, llamando a las urnas incluso a los votantes del PP.

No nos equivoquemos. Esto no tiene nada que ver con una estrategia de lavado de imagen, con un quedar como el partido justo que no pretende arrancar votos al oponente, sino que incluso anima al contrario a votar. Nada más lejos de la realidad. El trasfondo de todo esto, pongo la mano en el fuego, es que la clase política está empezando a olerse el pastel. Habrá quien esté manchando los pantalones al pensar en el hipotético caso de que la sociedad decidiese en masa no ir a votar, realizar abstencionismo activo. ¿Qué pasaría entonces? Que los partidos tendrían que replantearse su propia existencia, así como la viabilidad de la partitocracia reinante.

Pero, sinceramente, me ha sorprendido muchísimo que hayan sido tan tan descarados. Está visto que entre un PSOE que es cualquier cosa menos socialista y obrero, un PP cada día más nazi y una IU que ha perdido el norte desde hace mucho tiempo, el miedo a que la gente los mande a todos a la mierda está empezando a crecer poco a poco. Me congratulo y, nuevamente, te invito a que no sigas los designios electorales de los gurús de turno, te invito a que les digas a todos que se metan su pseudodemocracia por donde les quepa, quedándote en casita el día 9, ejerciendo tu derecho al no voto, a rechazar un sistema y una clase política podridos.

En otro orden de cosas, de la mano de El Mundo he encontrado hoy un blog muy bonito. Se trata de las vivencias y sentimientos compartidos, bajo un mismo enlace, en un mismo blog, de un informático de Israel y un profesor palestino. No he tenido tiempo de leer en profundidad todas las entradas, pero una vez más, el mundo virtual le mete un golazo al mundo real. Directo a favoritos. Pinchad aquí y bienvenidos a un blog de esperanza.

Actualización: Aquí está el link original a la noticia.

J.

lunes, 18 de febrero de 2008

Pozos de ambición

El mundo es injusto. Según IMDB, Christopher Lambert ha actuado en 56 películas. Daniel Day-Lewis en 25, siendo muchas de ellas trabajos desconocidos, para televisión o sin acreditar.

Tengo 27 años, así que eso de decir 'hace mucho tiempo que...' no tiene sentido. Pero diré que hace muchas, muchas, muchas películas que no veo una interpretación como la de Day-Lewis. No sé si podría poner la mano en el fuego por decir que es la mejor que he visto jamás. Desde luego, si he visto alguna mejor, no la recuerdo (lo cual ya es paradójico de por sí).

Pozos de ambición podría, en cierto modo, considerarse como una revisitación al ya mito de Ciudadano Kane, al sueño americano que se convierte en pesadilla, a los orígenes del capitalismo feroz. Pero no nos equivoquemos, esta vez no hay Rosebud. Esta vez sólo hay ambición, pura y dura, que no conoce de familia ni de religión, y los posibles sentimientos que tal vez se intuyen en algunos momentos, se diluyen en un final alucinado y alucinante.

Las dos horas y media largas de película comienzan con unos 20 minutos de silencio, que nos muestran cómo un hombre se trabaja su futuro. Las dos horas y cuarto restantes nos retratan ese futuro, y esa extraña relación empresario-hijo, empresario-hermano, empresario-predicador, empresario-el mundo.

La película ES Daniel Day-Lewis. Podría estar horas hablando de la interpretación de este hombre, pero me quedaré simplemente con el gesto. Ese gesto que ya apuntaba como Bill El Carnicero en Gangs of New York, entre lo irónico y lo guasón, lo incrédulo y lo cabrón. La expresión del que se cree -sabe- superior al que tiene delante, y que visiona su venganza en un futuro próximo, por lo que se deja humillar sin despeinarse demasiado. No he visto el resto de interpretaciones candidatas a Oscar masculino, salvo la de Tommy Lee Jones, pero desde luego creo que todos lo tienen jodido con un papel como el que se marca Lewis.

Y no, pese a lo que digan, las dos horas y media no se hacen largas. Salvo que tu película favorita sea Rambo, claro

J.

viernes, 15 de febrero de 2008

En racha

Pues las cosas van cayendo del cielo -o subiendo del infierno, que mola más- poco a poco. Oficialmente tengo concedida una nueva beca. Es poquita cosa, 3 meses de colaborador en un proyecto de innovación docente para los planes de implantación del crédito europeo ECTS, de marzo a mayo, pero viene a ser la cuarta beca en mi CV, que tampoco está nada mal. La principal consecuencia de esta beca es que voy a tirarme esos tres meses más liado que la pata de un romano, y además me pierdo ya casi con total seguridad el congreso en Lisboa por falta total de tiempo para preparar nada

Por otro lado me han admitido la ponencia de título “The unnameable myth which came from Africa: The presence of Africa in the narrative of H.P. Lovecraft”. Ahora vas y lo cascas. Sin confirmar todavía a ciencia cierta el día de la comunicación, sí es seguro que será el 17 ó el 18 de abril.

Van saliendo también algunas notas de los cursos del máster. Por ahora, un sobre y un notable. Pero esto se está complicando y agobiando por momentos, la verdad. Hay quien se sube a la parra y se cree que el máster está compuesto exclusivamente de su módulo. Pero bueno, eso ha pasado siempre, qué le vamos a hacer.

Y por último, se ha presentado la Cosmopoética 2008. Este año se ve que se han cansado ya de Derek Walcott (o Derek Walcott se ha cansado de Cosmopoética), y se traen a otros dos premios Nobel. Primero, Dario Fo, que ni fú ni fá ni fo :D Bueno, en realidad no puedo opinar, porque no conozco su obra. A ver qué nos cuenta. Pero el para mí verdaderamente espectacular fichaje es el segundo. Ni más ni menos que Seamus Heaney. Estoy todavía flipándolo en colores. Si hay dos rasgos que puedo atribuirle al poeta irlandés son los de telúrico y evocativo.

Ya sabéis que la poesía no es mi fuerte, pero Heaney es de esos poquitos poquitos que estudié en la carrera, me dejaron impresionado y pasaron a la reducida lista de mis poetas laureados personales (esto es: Elizabeth Bishop, Ted Hughes, Walt Whitman, Marianne Moore y el propio Heaney. Y poco más). Ahora sólo espero que no tenga la mala suerte de que mi comunicación y el recital de Heaney coincidan. Capaz soy :|. Os dejo con un poema suyo, claro.

"The Harvest Bow"

As you plaited the harvest bow
You implicated the mellowed silence in you
In wheat that does not rust
But brightens as it tightens twist by twist
Into a knowable corona,
A throwaway love-knot of straw.
Hands that aged round ashplants and cane sticks
And lapped the spurs on a lifetime of game cocks
Harked to their gift and worked with fine intent
Until your fingers moved somnambulant:
I tell and finger it like braille,
Gleaning the unsaid off the palpable,
And if I spy into its golden loops
I see us walk between the railway slopes
Into an evening of long grass and midges,
Blue smoke straight up, old beds and ploughs in hedges,
An auction notice on an outhouse wall--
You with a harvest bow in your lapel,
Me with the fishing rod, already homesick
For the big lift of these evenings, as your stick
Whacking the tips off weeds and bushes
Beats out of time, and beats, but flushes
Nothing: that original townland
Still tongue-tied in the straw tied by your hand.
The end of art is peace
Could be the motto of this frail device
That I have pinned up on our deal dresser--
Like a drawn snare
Slipped lately by the spirit of the corn
Yet burnished by its passage, and still warm.

J.

jueves, 14 de febrero de 2008

Go, Obama, go!

Que el sistema político estadounidense tiene fisuras es algo indudable. Pero, desde luego, nos llevan años luz. Es que además es hasta entretenido. Con el tema de las primarias demócratas, me lo estoy pasando pipa, como si fuese una carrera de F1. Apuesto por Obama, sin duda. Al principio parecía caballo perdedor, pero está dando la sorpresa, y espero que se consume y se lleve las primarias.

No tengo nada especial en contra de la señora Clinton, pero creo que la posibilidad de que Obama llegue a ser presidente de los Estados Unidos me estimula muchísimo más. Una mujer contra un afronorteamericano, que a su vez compiten contra el republicano, que tiene nombre de patatas fritas congeladas y combatió en Vietnam.

Creo que esta vez tocan demócratas. No solo lo creo, lo deseo. McCain tiene un nosequé, quéseyo, que me da susto. Tiene pinta de ser como Bush pero en listo. Esto es, un cabrón con iniciativa. Y creo que no hay nada más peligroso.

Pero la hipotética victoria de Obama en primarias y generales también me preocupa. Creo que no soy el único que ha pensado que el pellejo del primer presidente negro podría correr serio peligro. Si llegase a la Casa Blanca, espero que me equivoque.

Ahora sueño con el día en que las primarias en España sean igual, y que los candidatos a la presidencia no sean impuestos, y se tengan que patear todos los pueblos en busca de los votos. ¿Será mucho soñar? El tiempo lo dirá. Mientras tanto, me quedo con EE.UU. Con los demócratas. Con Obama. Go, Obama, go!!!

J.

lunes, 11 de febrero de 2008

No es país para viejos

El hecho de que me gusta mucho Bardem, los Coen me encantan y la novela de Cormac McCarthy No Country for the Old Men me resultó también interesante, ponían todo a favor de que la última peli de los Coen me iba a gustar. Y así fue.

El libro es claramente cinematográfico, por lo que el esfuerzo de adaptación a la pantalla ha debido de ser 'menos esfuerzo'. Los primeros compases de la cinta son calcos visuales de lo que McCarthy describe en las páginas de la novela, y el desarrollo se ajusta bastante bien a lo que nos contaba el escritor. Es cierto, no obstante, que se han quedado en el tintero algunos diálogos muy importantes, que daban algo más de profundidad al personaje de Bardem, que tocaban temas interesantes y que, en cierto modo, llevaban parte de la esencia del libro. De todas formas, ya sabemos que no se puede adaptar al pie de la letra, y no tengo nada que objetar. El que quiera saber lo que se pierde, que se lea el libro.

Los Coen han vuelto a su estilo, en la línea de Fargo, violentos, crudos y, lo que probablemente es más inquietante, realistas.

La descripción de esa América profunda, la que sostiene en el poder a su actual presidente, las zonas fronterizas con México, los turbios negocios de las mafias y el narcotráfico... dan ambientación a un grupo de personajes con sheriff viejo y cansado, asesino demente y varios cazadores cazados. Y todo ello planteado como excusa para reflexionar sobre la violencia, sobre la situación actual del mundo (aunque la ambientación sea en 1980), sobre la añoranza de tiempos pasados, verdadero eje central de la novela, y algo más difuminado (no por ello desaparecido) en la película.

El reparto es fantástico. Bardem se sale en su papel de Chigurh, el psicópata que persigue al ¿protagonista? de la historia. Tommy Lee Jones, para mí el verdadero motor de la cinta, reflexiona en voz alta, y no se acaba de creer lo que pasa en el mundo, porque sus antepasados también fueron sheriffs y no necesitaban llevar pistola. Josh Brolin huye impecablemente. La única pega, sin duda, el reparto femenino, que está bastante desdibujado (tanto el personaje de Carla Jean como su madre).

La moraleja de la película, que según he comprobado no es tan evidente para todo el mundo, se resume en uno de los diálogos sobre la muerte de un pariente del sheriff. Mientras la mujer intentaba taponarle la herida, él seguía buscando su escopeta para disparar. No es país para viejos.

J.

domingo, 10 de febrero de 2008

Lecciones literarias, capítulo 8: los cuentos

Retomo las lecciones literarias, que tenía bastante olvidadas, con un tema que me encanta: el cuento infantil.

Me arriesgaría a decir que la gran mayoría de los lectores de este blog han leído o escuchado un cuento alguna vez en su vida (no pondría la mano en el fuego por ciertos visitantes despistados, que buscan el rapidshare de Gran Hermano: una polla en cada mano, claro). Cuando crecemos, cambiamos los hábitos lectores, y muy pocas veces recordamos aquellos cuentos que leíamos y escuchábamos cuando éramos pequeños. Sin embargo, la importancia del cuento es vital en el desarrollo de todo lector y, aunque es una falacia ampliamente extendida el que el cuento infantil es un género menor, os sorprenderá (o no) saber que hay estudios muy importantes e influyentes sobre teoría literaria del cuento infantil, que han sido verdaderos hitos en la historia de la narratología.

Si hay que hablar de un verdadero 'maestro teórico del cuento', ése es Vladimir Jakovlevich Propp, estructuralista ruso que escribió la que probablemente sea la obra más interesante en este campo. Se trata de Morfología del cuento, un volumen en el que Propp teoriza sobre el género que nos ocupa.

La interesantísima propuesta de Propp se basa en que existen 31 puntos que aparecen de manera recurrente en toda la literatura de hadas. Evidentemente, cada cuento no tiene por qué acudir a los 31 puntos, pero la clasificación es válida para toda la tradición, y cualquier cuento que recordemos, ya sea de los Grimm, Rodríguez Almodóvar, Andersen, Perrault, Las mil y una noches, Tolkien o Margaret Atwood, incluirá en su estructura, ineludiblemente, varios de esos apartados y situaciones.

Esas 31 funciones, directamente traídas desde la Wikipedia, son las siguientes:

01) Alejamiento. Uno de los miembros de la familia se aleja.
02) Prohibición. Recae una prohibición sobre el héroe.
03) Transgresión. La prohibición es transgredida.
04) Conocimiento. El antagonista entra en contacto con el héroe.
05) Información. El antagonista recibe información sobre la víctima.
06) Engaño. El antagonista engaña al héroe para apoderarse de él o de sus bienes.
07) Complicidad. La víctima es engañada y ayuda así a su agresor a su pesar.
08) Fechoría. El antagonista causa algún perjuicio a uno de los miembros de la familia.
09) Mediación. La fechoría es hecha pública, se le formula al héroe una petición u orden, se le permite o se le obliga a marchar.
10) Aceptación. El héroe decide partir.
11) Partida. El héroe se marcha.
12) Prueba. El donante somete al héroe a una prueba que le prepara para la recepción de una ayuda mágica.
13) Reacción del héroe. El héroe supera o falla la prueba.
14) Regalo. El héroe recibe un objeto mágico.
15) Viaje. El héroe es conducido a otro reino, donde se halla el objeto de su búsqueda.
16) Lucha. El héroe y su antagonista se enfrentan en combate directo.
17) Marca. El héroe queda marcado.
18) Victoria. El héroe derrota al antagonista.
19) Enmienda. La fechoría inicial es reparada.
20) Regreso. El héroe vuelve a casa.
21) Persecución. El héroe es perseguido.
22) Socorro. El héroe es auxiliado.
23) Regreso de incógnito. El héroe regresa, a su casa o a otro reino, sin ser reconocido.
24) Fingimiento. Un falso héroe reivindica los logros que no le corresponden.
25) Tarea difícil. Se propone al héroe una difícil misión.
26) Cumplimiento. El héroe lleva a cabo la difícil misión.
27) Reconocimiento. El héroe es reconocido
28) Desenmascaramiento. El falso queda en evidencia.
29) Transfiguración. El héroe recibe una nueva apariencia.
30) Castigo. El antagonista es castigado.
31) Boda. El héroe se casa y asciende al trono.

No hay que ser un lince para darse cuenta de que en todos los cuentos que conocemos aparecen algunas de las situaciones de la lista, ¿verdad? Que se lo pregunten a Shrek si no :)

Ya se discutió algo sobre la literatura infantil y juvenil en otra entrada de este blog, pero volveré a repetir de nuevo que la importancia de estos primeros textos es fundamental. Más aún, muy probablemente algunos rasgos de la clasificación de Propp os podrán resultar familiares no ya simplemente de cuentos, sino de literatura adulta en toda regla. Me remito a obras como El señor de los anillos, El Conde de Montecristo, El jorobado de Notre-Dame...

Sed buenos, cuentistas ;)

J.

jueves, 7 de febrero de 2008

La lengua franca

Que no francesa... al menos eso es lo que debe de estar pensando el escritor libanés afincado en Francia Amin Maalouf.

Resulta que un selecto grupo de intelectuales europeos (aunque El Líbano no sea europeo) están poniendo el grito en el cielo porque el inglés se ha convertido en la lengua de comunicación internacional. La noticia completa está aquí. Según El País, Maalouf ha dicho que "Su capacidad expansiva [del inglés] pone en peligro a las otras europeas y amenaza con convertirse en un elemento de fractura entre los pueblos desencantados por el arrinconamiento de sus propias lenguas y culturas en la UE".

Antes de nada, sería interesante plantearse si verdaderamente el escritor ha dicho esas palabras. En la noticia entrecomillan claramente los fragmentos extraídos del informe de los sabios, pero ese en particular no lo está. Simplemente cuenta el periódico que todo eso es 'según Maalouf'. Presupongamos la inocencia y objetividad periodística de El País (que ya es mucho presuponer), y pensemos que, efectivamente, Maalouf ha dicho eso. Qué fuerte, ¿no? Que alguien diga que el tener una lengua que permite que miles de millones de personas se comuniquen entre sí sea una fuente de fractura entre los pueblos de la UE me parece decir mucho.

Vayamos por partes. El inglés es hoy por hoy la lengua franca, nos guste o no. A mí particularmente me encanta, que por algo soy filólogo inglés. Pero el caso es que también habrá quien no piense como yo, cosa que respeto. Pero las evidencias son las evidencias. Es una lengua relativamente facilona de aprender, hablada como primera o segunda lengua por unos mil millones de personas (aunque las cifras varían entre 800 y 1500 millones según autores), y es la lengua oficial del todavía país más poderoso del mundo. Mientras China crece, claro.

Me parece que eso de juntarse unos cuantos sabios aburridos a decir que el inglés es un peligro es, valga la 'rebuznancia', muy peligroso. La teoría por la que abogan, aprender una tercera lengua, esa lengua personal adoptiva que ellos dicen, es fantástica. Muy utópica, por lo menos en España, pero fantástica.

Sin embargo, decir que el inglés es el coco viene a ser como patalear porque el francés o el alemán no lo son. Es curioso, además, que entre ese grupo de ingenios no se encuentre ningún representante del castellano, tercera o cuarta lengua más hablada en el mundo, europea, y para nada asustada del crecimiento del inglés. Que, por cierto... ¿se han parado esos lumbreras a pensar que el inglés también es una lengua europea? Irlanda e Inglaterra, hasta donde yo sé, también forman parte de Europa, si las cosas no han cambiado demasiado desde la última vez que estudié geografía.

Desde ya, tienen la batalla perdida. Lo saben, así que se dedican a hacer demagogia barata, a ver si el francés se vuelve a poner de moda. Lo siento, muchachos. Me temo que no va a ser así. Hoy por hoy la gente aprende inglés. Si tienen tiempo para otra lengua, con suerte escogen francés, pero cada vez son más y más los que se decantan por árabe, urdu/hindi o chino. Hay que tener visión de futuro, un poquito de visión global y dejarse de patochadas nacional-románticas, que hacen mucho daño. Y si ustedes quieren dedicarse a aprender eslovaco, adelante. Yo no tengo tiempo.

Señores: el inglés NO es el enemigo. La principal función de un lenguaje es la comunicación. ¿Qué más da que sea inglés, francés, latín o esperanto? Lo bonito es poder comunicarse. Period.

J.

miércoles, 6 de febrero de 2008

Tema decidido

Creo que ya tengo de lo que hablar para la comunicación del congreso de Lisboa. Me voy a decantar por psicología comparada aplicada al cine. Es toda una revolución, pero quiero que juzguéis por vosotros mismos. A mí el segundo vídeo me da náuseas.





Ahora que venga alguien y me diga que George A. Romero no es un visionario. Qué asco damos, de verdad. Me quedé en shock cuando vi el vídeo de marras (el segundo, claro).

J.

martes, 5 de febrero de 2008

Los crímenes de Alex de la Iglesia

Durante el periodo navideño, la ausencia de estrenos que llamasen mi atención en la cartelera ha sido notable. Como siempre, ahora estrenan veinte cosas a la vez que me interesan. Así que hay que ponerse las pilas, y el otro día pasó por la picota Los crímenes de Oxford, del colgao de Alex de la Iglesia.

La verdad es que no hay demasiado donde rascar. Teniendo en cuenta la trayectoria del director, me esperaba más. Pero el cambio de registro al folletín de misterio no es el fuerte del vasco. Los crímenes de Oxford es una peli bien dirigida, entretenida, con algunos diálogos filosóficos-divulgativos bastante interesantes, pero no deja de ser una cinta de asesinatos. Y la verdad, a mí me resultan todas iguales. Entretenidas pero iguales.

Las partes filosóficas, como digo, han sido de las que más me han llamado la atención. La discusión entre Elijah Wood y John Hurt en el aula es de esas que explican un pensamiento filosófico de manera entretenida y sencilla, al alcance de todos los públicos -menos de aquella que, sentada a mis espaldas, dijo al empezar la película '¿pero es española?'-, y te dejan alguna idea flotando en el aire.

El resto de la proyección, pues lo típico. Asesino inteligente que reta a los estudiosos y vuelta de tuerca en la solución del enigma.

Los actores... pues John Hurt divertido, Elijah Wood como siempre (con cara de Frodo, qué le vamos a hacer), y Leonor Watling innecesaria. Es decir, innecesaria... simplemente tiene dos grandes razones para estar en la película. Su papel, si no consideramos dichas razones, es totalmente prescindible.

En fin, para pasar el rato si te gustan las pelis de misterio, los personajes rarunos, las novelas de Agatha Christie y comprobar qué tal se le da a De la Iglesia rodar en el extranjero, en inglés y con un giro en sus tendencias cinematográficas.

En breve (cuando las estrenen en las próximas dos semanas), No Country for the Old Men, Pozos de Ambición y Sweeny Todd.

J.

viernes, 1 de febrero de 2008

Salto al vacío literario

Eso es lo que acabo de hacer esta mañana. Me he comprometido a leerme una novela, preparármela, escribir un capítulo de un libro sobre ella... y ni siquiera sé de qué va. Sí señor, con dos cojones. Se trata de Extremely Loud and Incredibly Close, de Jonathan Safran Foer. Curiosamente, me traje el libro de Estados Unidos. Lo compré allí por recomendación del gran Tobi, un amigo alemán. Por la descripción que me dio del libro, me sonaba a paranoia en la onda de Christie Malry's Own Double Entry, un libro en el que había profundizado ya hace unos años para una comunicación en un congreso, y que rebosa experimentación por todas partes (incluye hasta facturas dentro del propio libro). Pues Extremely Loud and Incredibly Close parece que juega con los mismos recursos, pero se mete ni más ni menos que en el 11-S. A ver por dónde sale la experiencia, que como el libro no me guste me voy a divertir. Pero bueno, si en verdad es un libro de ese tipo, tan experimental y raruno, seguro que me encanta. Me sientro como en casa con cosas así :P

Y un nuevo salto al vacío... lo mismo voy a Lisboa en julio para presentar una comunicación en un congreso internacional. El único detalle sin importancia es que el congreso es sobre psicología y literatura/cine... De lo segundo ando bastante bien (espero), pero de psicología ando como Cristo de pecados. Si alguien tiene algún tema genial que no piense desarrollar, que una ambos campos, que se estire y me lo cuente. Sin idea no hay comunicación, sin comunicación no hay congreso. Pero la verdad, no me veo yo muy capacitado para hablar de psicología...

Bueno, y otro favor... ¿alguien tiene enchufe en tráfico en Madrid, suficiente para que una multa considerablemente importante se despiste? Por pedir que no quede :)

J.