jueves, 27 de noviembre de 2008

Tutto tuto

Admitámoslo. El ser humano, por naturaleza, es un cabrón. Disfrutamos como enanos con la desgracia ajena, y si hay algo que nos encanta es ver a gente pasándolas canutas. Sin ir más lejos, yo no dejo de partirme de risa cada vez que me imagino a la Aguirre en medio de la recepción del hotel, con balas silbando por todas partes, y ella así con su pelo enlacado y su cara de no enterarse de nada.

Hay dos subgéneros de la miseria humana que nos apasionan, el susto y el hostión. Personalmente, teniendo en cuenta que me dedico a investigar el momento en el que los dioses exteriores vendrán a comernos a todos, me quedo con los sustos. Así que hoy quiero haceros partícipes de algún momento apoteósico que pulula por ahí.

Aquí tenemos un claro ejemplo de una madre cabrona (¿se desmaya el niño?):



Después están los orientales, otra raza. Aquí, un famoso vídeo en el que la lían parda a costa de aquella peli de cutrerror llamada 'The Ring':



Y aquí, otro amigo o familiar cabrón, con ganas de que el niño de turno no duerma en tres meses:



Y por último, una de cámara oculta. De cómo llevar las cosas un poco hasta el límite y casi infartar a la pobre víctima:



J.

2 comentarios:

quéinsólito dijo...

VE LO HA QUERIDO.

Hoy en mi blog, las terribles experiencias de Esperanza Aguirre en Mumbai. No te lo pierdas. En exclusiva para quéinsólito.

Creo que es todo un documento.

Anónimo dijo...

Me encanta el primero
Es genial

Salu2