jueves, 20 de mayo de 2010

Lovecraft: Avances y planes

Pronto se cumplirá el primer trimestre desde mi nunca poco anhelada firma de la plaza predoc FPDI. Esta entrada viene a servir de terapia de reflexión más que de otra cosa, y no se trata sino de una puesta al día de qué pasa con la tesis. Por otra parte, ese era el objetivo principal de los Sueños en la casa de la bruja originalmente, así que tampoco está tan mal...

Se podría pensar que tres meses es mucho tiempo, pero cuando entras en la dinámica de la universidad, te das cuenta de que se pasan en un suspiro. Antes de que se me empiece a acusar de vago, cafetero, chupóptero y demás lindezas que aceptaré de buen grado, queden expuestos mis razonamientos.

Se supone que a mí me están pagando por hacer una tesis doctoral, y con ese propósito llego todas las mañanas al despacho. Ahora me encuentro en una fase en la que, básicamente, me tengo que dedicar a leer más y más. Leo libros de señores sabios que dicen cosas un tanto raras, y luego tengo que reunirme con mi director de tesis para discutirlas -pasando antes por una tanda de dudas que suele acaparar la mayoría de las sesiones...-. Slavok Zizek (el nombre se escribe con algunos acentos que mi teclado no tiene o, si tiene, paso de buscar), por ejemplo, ha sido uno de los primeros traumas teóricos que he tenido. Alguien que unifica Lacan, marxismo y psicoanálisis y ofrece como resultado una visión de las ideologías no puede ser sencillo de tratar. The Sublime Object of Ideology, el primer libro que he afrontado de tan regio caballero, me tuvo leyendo a un ritmo vertiginoso de... no más de 12 ó 15 páginas por hora. Las conclusiones, una vez estudiado, repasado, discutido, releido... son interesantes y demasiado extensas para dejarlas por aquí reseñadas, pero es cierto que llegar a un puñado de muy intensas ideas me ha costado sangre, sudor y lágrimas. No me quiero imaginar cuando llegue a los Manuscritos Pnakóticos o al Necronomicon...

El caso es que ahora estoy revisando, una vez más, algunos ensayos clásicos sobre Lovecraft -Levy, Joshi, Houellebecq...- en busca de puntos de conexión con las ideas de Zizek. Además, ahora que soy oficialmente parte del Departamento, tengo a mi disposición una fantástica herramienta llamada préstamo interbibliotecario. Ya era hora. Si son capaces de encontrar la media docena de libros que les he pedido, merecerán un puesto de honor en el banquete de Cthulhu. Deberían ser el postre.

Pues hasta ahí, la teoría pura y dura. Ahora pasemos a los otros aspectos extra-académicos que consumen tiempo como lapas. Os pongo un ejemplo: En septiembre, si todo va bien, me marcharé de estancia a Nottingham durante tres meses, hasta antes de Navidad. La idea es que asista como oyente a un máster de teoría crítica bastante interesante que imparten allí. Bien, pues llevo casi dos semanas dedicándome casi exclusivamente a redactar informes, memorias, permisos... Dos jodidas semanas de papeles, vamos. Y encima voy mal de tiempo porque, oh sorpresa, la UCO reduce los plazos que pone la Junta porque a ellos les parece bien :| A la burrocracia, sumémosle consejos de departamento, reuniones de grupos de investigación, aburridos e inacabables cursos de formación, peleas con el pc, idas y venidas interminables a despachos, biblioteca, sala de informática, rectorado... Y sí, joder, también desayuno, que todos lo estareis pensando XD. En fin, el caso es que me pongo en el pellejo del que encima tenga que estar matriculado en un máster y se me caen los palos del sombrajo...

Ahora, desde luego, me creo eso de que las estancias son los periodos más provechosos y en los que realmente se hace la tesis...

Ah, y creo que a mí, a partir del año que viene, también me pilla el recorte salarial :O.

J.

1 comentario:

ElHombrePancho dijo...

El papeleo es lo peor que le puede pasar a uno (o eso he oído).
Muchísimo ánimo y ya nos veremos por la facultad el año que viene (si Yog-Sottoth, que es su campo, quiere).